Por: Judith Muñiz Peraza
El día 23 de octubre me dirigí al Policlínico Julio Antonio Mella de Guanabacoa, para ser atendida por el ginecólogo ya que había sido remitida por el clínico Dr. Mandina, como resultado de dos fibromas que me producen abundantes sangramientos. Después de esperar más de tres horas que me tocara el turno, el especialista no quiso atenderme, pues dijo que tenía que ser por el ConsultorioMédico de mi área, me retiré a la casa con fuertes dolores bajo vientre.
Al otro día, me dirigí al citado consultorio, pero tampoco tuve suerte, ya que la doctora que estaba allí asignada, hacía tres días que había salido a cumplir misión a Venezuela. Al no haber médico porvarios días situaron otra doctora, pero tuvo que salir de licencia porque tenía el hijo enfermo.
Buscando una solución hablé con la enfermera y me respondió que el ginecólogo tenía ocho consultorios que no atendía, y que entre ellos estaba el que me pertenecía. Dijo no explicarse por qué no me había consultado en el policlínico; mientras tanto yo sigo sangrando sin poder operarme los dos fibromas que tengo.
Guanabacoa, 12 de noviembre de 2013.