viernes, 29 de noviembre de 2013

LA BALANZA DE LA JUSTICIA SE PERDIÓ

Por: Misael Aguilar Hernández  

Una pregunta recorre Bejucal, municipio de la actual provincia de Mayabeque: ¿Dónde está la balanza de la estatua que representa la justicia, en el céntrico parque Maceo-Gómez?; la que hace varios años desapareció de su mano, le fue roto uno de sus dedos del que prendía. Varias son la versiones de cómo sucedió el percance, una de ellas afirma que un individuo en estado de embriaguez trepó sobre el pedestal y se la llevó; fue detenido, multado y cumplió una sanción que nadie sabe a ciencia cierta el tiempo en que consistió.

Desde el aciago día en que desapareció la balanza, donde simbólicamente se pesaba el derecho o la ausencia de él, no ha regresado. La estatua de la justicia lleva levantado su brazo de piedra sosteniendo en su dedo roto la nada, mientras su otro brazo reposa en la espalda; la gente ve en esto un símbolo y comenta que donde antes estaba la justicia ahora solo queda su ausencia.

La pregunta va de una esquina a otra del pueblo ¿Dónde está la balanza?. Al parecer se guarda actualmente en el Museo del municipio, lo que convierte esta decisión en una metáfora que se explica diciendo: “En este país la justicia ya es museable y ese es su mejor destino.

De nada sirve promover campañas para incentivar buenos hábitos, cuando la fuente de laindisciplina son los promotores, no han reparado en que ese monumento sin sus atributos es toda una protesta desde el punto de vista conceptual, colocada en ese lugar céntrico por ellos mismos. Nadie sabe cuándo volverá la balanza, la estatua con los ojos que no miran lo justo o lo injusto sinomás bien el vértigo y las nubes, no es ya representativa de la justicia, es simplemente un monumento a la incertidumbre.

En los medios oficiales se habla hasta la saciedad del agobio que representan las indisciplinas sociales, pero lo cierto es que han penetrado tanto en la piel de la sociedad que ya se consideran parte inseparables de su cuerpo y lo que es peor el ciudadano común no concibe la vida sin ellas, pues parafraseando el dicho popular: más valen malas conductas conocidas que buenos hábitos por conocer.

 

Mayabeque, 19 de noviembre de 2013.