Por: Denia Fernández Rey
Más de un año ha pasado desde este fenómeno y la gran mayoría de las casas que quedaron destruidas, todavía no han tenido una solución, ni el régimen ha tomado medidas intermedias para aliviar los problemas de estas familias.
En Palma Soriano, provincia de Santiago de Cuba, aún las personas afectadas viven en condiciones precarias, muchos a la intemperie, otros sin privacidad en su vivienda, pero todavía mantienen laesperanza de que algún día puedan vivir como seres humanos.
Palma Soriano, 10 de diciembre de 2013.