De esta forma Andrés se gana la vida, se tapa la cabeza para protegerse de las partículas que suelta la máquina.
Andrés Rodríguez de 70 años de edad, reside en la calle 25 # 704 entre D y E, Vedado, municipio Plaza de la Revolución, Ciudad de La Habana.
El viejo Andrés como todos le llaman en el barrio, se dedica a pulir objetos de bronce, su especialidad son las lámparas antiguas, limpia las piezas de cristal y pule el metal, cobra según el tamaño de la pieza, que no pasa de 5 cuc (peso cubano convertible). Según me cuenta Andrés, no cobra más, porque la gente no tiene mucho dinero, y trata de mantener una clientela fija que cada vez es menor.
“Cobro una chequera de 200 pesos moneda nacional que no me alcanza, por lo que me tengo que dedicar a este otro trabajito, yo que lo que tengo que hacer es descansar y vivir de mi pensión. Vivo solo en este cuartucho de 4x4, estoy bien en comparación con otros viejos que los veo dormir en el parque o en la calle sin comida y sucios”.
“Para mí la vida se me ha puesto muy difícil, ya que además de tener pocos ingresos, no hay comida, y tienes que comprar en las TRD (Tiendas de Recaudación de Divisas) el aseo personal: jabón, detergente, pasta de dientes. Tengo que comprar los cuc a un precio de 25 pesos cada uno. Dime ¿en qué me quedo? En nada, gracias a Dios me cae algún trabajito de cuando en vez, y me puedo defender hasta que pueda que ya me queda poco”.
“Mira, dicen en el barrio que hace poco en el parque Mariana Grajales mataron y violaron una estudiante extranjera de medicina. Yo fui hasta el parque y vi la sangre, que dicen era de la víctima, no sé si será cierto esto, pero de esas cosas no dan noticias, ni dicen si cogieron a los asesinos lo que hace que el rumor prolifere. Te hago esta historia porque me doy cuenta de que están sucediendo cosas muy extrañas últimamente, por lo que me mantengo casi todo el tiempo dentro de mi casa, salgo solo para lo necesario, buscar comida o alguna otra cosa ¡como está esto mi'jo! Y lo peor de todo es que se va a poner más mala todavía la situación, qué clase de etapa les ha tocado vivir a ustedes, los compadezco, porque yo ya estoy cumplido”.
“De todas maneras si tienes algo para pulir me lo traes, que no está de más, el trabajo genera dinero para poder vivir”.
Ciudad de La Habana, 24 de mayo de 2010.
Suceso narrado por el comunicador comunitario Lázaro Yuri Valle Roca