El ciudadano Armando Rodríguez Amaro, vecino de Calzada de San Miguel entre Monterrey y Vista hermosa, No.10007, municipio de San Miguel del Padrón, me comunica lo siguiente:
“En 1959, cuando triunfó la Revolución, es decir mi desgracia; yo tenía una panadería que construí en el fondo de mi casa, pared con pared y me fue confiscada en contra de mi voluntad, por los que hoy se nombran revolucionarios”.
“Hasta la actualidad fue empleada como tal (una panadería), pero a causa del deterioro por la falta de mantenimiento al local, fue trasladada. Y ahora mi propiedad, (digo mi propiedad, porque nunca entregué mis papeles que notifican que la panadería, el terreno donde se construyó y toda su maquinaria está a nombre mío) está desocupada y ya con la esperanza que me lo devolvieran hablé con mi nieta para que fuera a la Reforma Urbana, para reclamarla y le dijeron que tenía que esperar a que la pasaran a vivienda. Ella le explicó que yo soy propietario de ese local que local, que por favor le avisaran para hacer oficial la reclamación y la respuesta que le dieron fue que a mi no se me iba a devolver nada, porque dicho inmueble se iba a utilizar para hacer una pizzería estatal. En fin que el gobierno todavía va a seguir utilizando lo que me robó para beneficio propio.”
Ciudad de La Habana, 15 de marzo de 2010.
Sucesos narrados por el comunicador comunitario Yazmani Nicles Abad