jueves, 7 de diciembre de 2017

Cuba y Honduras: Haz lo que yo digo…

La Habana se ha lanzado a criticar los sucesos recientes en el país latinoamericano

Jueves, diciembre 7, 2017 | Martha Beatriz Roque Cabello |


LA HABANA, Cuba.- Aunque no es bueno sufrir vergüenza ajena, en ocasiones se siente pena de lo que dice el régimen, porque se percibe —sin lugar a dudas— la falta de escrúpulos de sus funcionarios y también el impudor con el que se atreven a hacer algunas declaraciones.


Ese es el caso de la nota que salió en el periódico Granma (Órgano Oficial del Partido Comunista de Cuba), el pasado lunes 4 de diciembre, referida a las tensiones que ha creado la situación electoral en Honduras, cuando transcurrida más de una semana de las elecciones, la oposición habla de irregularidades en el proceso y salió a las calles para defender a Salvador Nasralla, (Alianza de Oposición) como ganador.



El viceministro del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) de Cuba, Rogelio Sierra Díaz, al efecto hizo una declaración en la que plantea de forma textual: “Rechazamos la represión contra las protestas populares, lamentamos la pérdida de vidas humanas y llamamos a respetar la voluntad del pueblo”.


Leer semejante elucidación, da la idea del cinismo y la mentira en la que se desarrolla la política del régimen dictatorial cubano y, además, produce una gran indignación que aumenta el sentido de impotencia que tenemos todos los que vivimos bajo la bota represiva de la dictadura. Pero como si fuera poco continúa diciendo: “Rechazamos la injerencia en los asuntos internos y demandamos el derecho a la paz…”



Solo habría que mirar dentro de la isla, la forma en que reprimen a los disidentes que protestan por cualquiera de las difíciles situaciones en que vive el pueblo de Cuba, y en particular a los opositores. Ejemplos hay muchos, que se han desarrollado durante la etapa de Fidel Castro y continúan con su hermano en el poder; pero baste citar como, cada domingo impiden que se manifiesten las Damas de Blanco y las arrestan de forma violenta.


Nadie olvida aquel 5 de agosto que la gente salió a la calle, en lo que dio por llamarse de forma popular “El Maleconazo”, y la represión que se desató contra las personas que quisieron manifestarse de forma libre.



También Orlando Zapata Tamayo quiso protestar por los métodos usados contra él en la prisión y comenzó una huelga de hambre, que después de una brutal golpiza, culminó con su muerte. En ningún momento el régimen lamentó la pérdida se esa vida humana, por el contrario, lo que hizo fue ensañarse en él, tratando de desprestigiarlo, aún después de desaparecido.


De igual forma, aquellas personas que quisieron encontrar la libertad en grupo y se lanzaron al mar en el Remolcador 13 de marzo, fueron brutalmente reprimidas y la sangrienta dictadura mató a mujeres y niños. Otro ejemplo inolvidable lo constituye el asesinato de los pilotos de Hermanos al Rescate, que quisieron ejercer su derecho a la libertad y fueron abatidos por aviones cubanos, incluso en aguas internacionales.


Se haría interminable la lista, seguro que cualquier lector podría añadir alguna alusión más a la forma en que de manera histórica se ha reprimido y asesinado, a aquellos que protestan en Cuba, durante el tiempo que ha durado la mal llamada “Revolución”.


Nadie recuerda una declaración de algún funcionario gubernamental cubano, durante los meses que se llevaron a cabo las protestas populares en Venezuela y que el presidente Maduro abatió con todo tipo de equipos antimotines e incluso asesinando a más de un centenar de manifestantes. Por aquella época ni se lamentó la pérdida de vidas humanas en ese país suramericano, ni se llamó a respetar la voluntad del pueblo.



Cabría preguntar a Sierra por qué no se ha producido nota alguna del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, para que en Bolivia se respete el referéndum que se hizo y que resultó opuesto a que volviera a postularse su actual presidente Evo Morales; un grupo de personas del Tribunal Constitucional consideran que es posible que repita su mandato en contra de lo que dictaminó la voluntad popular.


Hasta dónde puede llegar la desvergüenza de esta gerontocracia corrupta que después de exportar las guerrillas y dar albergue en el país, a todo terrorista que lo haya necesitado, rechaza la injerencia en los asuntos internos y demanda el derecho a la paz; una paz que nunca ha cultivado.



El gobierno hondureño, y en particular su actual presidente Juan Orlando Hernández, están muy ocupados en mantener el orden en el país, por lo que seguramente no contestarán esta declaración del MINREX cubano; pero deberían estar atentos porque sale de nuevo a la palestra pública —y en particular en los medios de la isla— el expresidente de ese país, Manuel Zelaya Rosales, destituido en el año 2009.


Los amigos están para ayudarse, y este corrupto expresidente, asociado a la Alianza de la Oposición contra la Dictadura, pudiera seguir los ejemplos que le da el régimen cubano y practicar el dicho popular: “Haz lo que yo digo, pero no lo que yo hago”.