María de los Ángeles Palenzuela Roig, vecina de Finca América s/n, Calabazar, Boyeros, Habana explica lo siguiente: “He vivido siempre con la esperanza de que esto cambie. Si en el mundo han existido potencias poderosas y se han caído, cómo no se va a caer esta dictadura que lo que ha hecho es hacer pasar hambre y miseria a este pueblo.”
“Yo misma con 49 años, vivo miserablemente, mi casa por mucho que la arreglo se me moja toda. He tratado de resolver materiales con el gobierno, pero de nada ha servido. Ellos obligan al pueblo a comprarlo por fuera, pero carísimo y lo que gana una apenas me da para comer y lo cara que está la comida, tenemos que arreglarnos como podemos.”
“El piso de mi casa es de arena y cemento, las paredes de madera, tenemos la esperanza que algún día la podamos hacer de mampostería y vivir mejor, por lo menos lo más fundamental para vivir. Esta situación es para nosotros los pobres, porque para los que están arriba yo estoy segura que la vida es más fácil.”
Una colaboración de José Díaz Silva para la Red Cubana de Comunicadores Comunitarios