Por: Misael Aguilar Hernández
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El fango en las principales calles de Alquízar se ha convertido en el color local que identifica a este municipio. Las calles de este pueblo perteneciente a la actual provincia de Artemisa, se ven constantemente cubiertas por el lodo y la suciedad que –sin discusión- afean la imagen de este lugar, convirtiéndolo en algo muy desagradable.
Para quienes allí viven, es algo que resulta incómodo porque es imposible impedir que el fango llegue hasta sus puertas. También lo es para quienes trabajan en las tiendas y establecimientos que se encuentran ubicados en la calle principal, ya que constantemente las personas entran y ensucian el piso.
El objetivo de los locales es que se le dé alguna solución a esta situación, sobre todo de la calle principal cuyo entorno no deja de ser del conocimiento de la Dirección de Viales tanto municipal como provincial.
La temática de las calles de Alquizar no es algo de hace unos poco días, sino que ya hace años que esta situación existe y no se acaba de dar una salida, que sería para el bien de todos los pobladores y repercutiría de forma positiva en esta comunidad.
Las calles necesitan de un buen trabajo de viales, sobre todo la principal; además que se realice un fresado adecuado que les dé un buen nivel para que ayude al drenaje del agua cuando llueve. La experiencia de cómo se están llevando a cabo las reparaciones dice que debe tener una correctaterminación y no que le echen una fina capa de chapapote que dure solamente hasta que caiga el primer aguacero.
Si no se les hace una reparación rápida, dentro de poco tiempo serán callejones. En estos momentos se puede decir que debido a la suciedad y el fango están bien difíciles de transitar, incluyendo la calle donde se encuentran situadas las tiendas de la localidad, que es la de mayor tránsito de personas.
No hay dudas que es bien importante que existan estos comercios, pero también que la vía de acceso adonde se encuentran ubicados tenga una buena imagen, por el bien de la población y para hacerle más llevadera la vida cotidiana.
Artemisa, 25 de febrero de 2016.