21 de mayo de 2013
AÑ0 54 DEL TRIUNFO DE LA REVOLUCIÓN
Compañero de atención a la población
Me dirijo a Ud. para comunicarle lo que me ha sucedido con el compañero Jefe de Sector de la localidad deLa Cuevita. Uno de mis hijos fue citado a dicho sector y como madre fui a saber que había sucedido. En espera de la conversación del compañero con mi hijo, vi como por poner los pies en la pared fue multado un joven. No estoy en contra de las leyes de mi país, pero tampoco estoy de acuerdo que se tomen medidas,cuando en el mismo lugar se tiene una infracción peor que un pie en la pared. Me molestó lo que elcompañero le dijo al muchacho, nosotros debemos educar no destruir a nuestra juventud, y el compañero no usó la forma más correcta. Esto no es cuestionar su autoridad, es llamar la atención para que nos demos cuenta cuando actuamos mal y reconocer nuestros errores.
Al terminar su conversación con mi hijo, me acerco a él y le dije: “voy hablarle como militante que soy, un pie en la pared es menos dañino que la suciedad que hay en la parte lateral del sector” que “¿a quién se multaba por tener un criadero de mosquito en su local?”. A lo que él me respondió que él no tenía auxiliar de limpieza; y le contesté que eso no era justificación porque ese local era de las personas que trabajaban ahí; que estaba combatiendo un pie en la pared, que con un paño se limpiaba y no un vertedero de mosquito que si era dañino, porque traía mosquitos y por ende dengue cólera; y dijo que en su oficina o local no había mosquitos. Al parecer el compañero se sintió ofendido por tener yo la razón y a pesar que le dije que yo era una militante igual que él, no tuvo ética profesional y molesto me dijo: “deme su carnet para revisar su casa”,donde le contesté que él no tenía que revisar mi casa. Al ver que no le di mi cartera, me empujo para llevarme a su oficina.
Yo soy diabética y como me dijo que estaba detenida, le dije que me permitiera llamar a mi casa para que me llevaran algo de comer y me dijo que a él no le interesaba que yo fuera diabética. Como no tenía razón en el procedimiento que estaba utilizando, me preguntó que en qué trabajaba mi hijo y le contesté que no trabajaba; y me dijo que había trabajo y que de qué se mantenía le contesté que lo mantenía yo. Además que me iba a cuestionar en mi núcleo
Le dije: “mire como me dejó sus dedos marcados en el brazo”; me contestó que fuera y lo denunciara y eso fue lo que hice. No le bastó con eso cuando Ud. lo mandó a buscar el compañero en el lugar de espera comentó, que si no me hubiese podido quitar la cartera, me hubiese dado tres galletas, eso expreso sin saber que allí se encontraba mi nuera. Sinceramente estoy indignada que un agente de nuestras filas del PCC no tenga ética profesional, y en vez de construir una tranquilidad ciudadana maltrate a quien no debe maltratar;primero por ser mujer y segundo por ser una revolucionaria cabal y fiel a mis principios, es lamentable que sucedan estas cosas a tantos años de lucha .
Disculpe las molestias que haya podido ocasionarle
Atentamente
Clara Linares Jiménez