jueves, 24 de agosto de 2017

ARCHIVAN LA DENUNCIA

Por: Jorge Bello Domínguez


Teléfono: 53353648


 

El pasado 29 de marzo del año en curso, tres jóvenes obreros que se desempeñaban como custodios

 -no estatales- en una finca agrícola del municipio Güira de Melena fueron agredidos a tiros por el 

propietario de la tierra que se encontraba en estado de embriaguez. Según manifestó el agresor, 

descargó un revólver contra los mismos, por encontrar irregularidades que estaban cometiendo 

mientras realizaban la guardia en los cultivos. Así lo destaca uno de los agredidos ydenunciante de los 

hechos a las autoridades policiales, sin que hasta la fecha se haya hecho algo al respecto.


Según testimonio de una de las víctimas, todo ocurrió ehoras en la madrugada, cuando el 

ciudadano Ihosvany Acosta, pequeño agricultor y propietario de una finca localizada en el Consejo 

Popular “El Junco”, ubicada a tres kilómetros del casco urbano del municipio, decidió dar un recorrido 

por los sembrados y controlar a los custodios contratados por él. Cuenta uno de estos muchachos 

que cuando se percataron de la presencia del “patrón”, la emprendió a tiros en contra de todos


Los tres jóvenes agredidos son oriundos del oriente del país, que debido a la desastrosa situación 

económica en la que viven en su natal provincia decidieron trasladarse a Artemisa en busca de 

mejores oportunidades de subsistencia. Uno de estos chicos, que se identifica como Leandro Prado 

Santos, comentó: “La noche de los acontecimientos nos encontrábamos conversando con el custodio 

de la finca vecina en uno de los extremos de la propiedad, cuando vemos aparecer en la oscuridad al 

dueño de la finca que por la manera de hablar se notaba que se encontraba en estado de embriaguez,

 fue cuando nos percatamos de que traía una pistola en la mano, y entre gritos e insultos comenzó a 

disparar contra nosotros, ocasionando que dos de los custodios huyeran despavoridos, y yo me 

ocultara entre los arbustos temiendo ser descubierto por el tipo que estaba descontrolado.”


Otro de los testigos de lo ocurrido se nombra Rafael y era el sereno que cuidaba la finca colindante, 

este hombre fue quien dio aviso a la policía de lo que acontecía, mediante un teléfono celular que 

llevaba consigo. Leandro relató que, al llegar la autoridad al lugar del suceso, se encontraron con el 

agresor y el custodio de la propiedad vecina (Rafael), que les informó de lo acontecido -y para su 

sorpresa- fue testigo de cómo dejaban marchar al atacante, sin vacilaciones. Rafael decidió grabar la 

acalorada discusión que mantuvo con los agentespoliciales en su teléfono celular, pero fue víctima 

de maltrato y ofensas por parte de los uniformados.


Pasados cuatro meses de la denuncia hecha por los jóvenes contra el “victimario acaudalado”, no ha 

habido pronunciamiento de las autoridades policiales ni de la fiscalía respecto al hecho, tampoco se 

han tomado medidas con el atacante, quien continúa gozando de total libertad a pesar de haberse 

cometido un delito de tentativa de asesinato; teniendo como agravante que un arma de fuego, lo 

cual es sancionado con la privación de libertad en el Código Penal vigente, además de dar clara 

imagen de la impunidad con la que actúan estos señores pudientes ante el ala protectora de un 

sistema corrupto.

 

Artemisa, 10 de agosto de 2017.