Para los cubanos no es necesaria ninguna guerra nuclear para hallar la muerte, solo con deambular por las calles del país es suficiente. Balcones que caen a menudo, a cualquier hora en zonas residenciales; cables de corriente eléctrica fuera de sus registros.
En Cuba todo esto es imposible de solucionarse o de prevenirse, debido al “bloqueo”, según plantean los gobernantes. El pueblo, por su parte, no saldría de la casa el día en que se aborde el tema en una Mesa Redonda.
Ciudad de La Habana, 13 de setiembre de 2010
Sucesos narrados por el comunicador comunitario Leonardo Hernández Camejo