martes, 25 de enero de 2011

Manuela Aleida Ávila Martínez, C.I. 42030106056, vecina de calle 104 # 870001 e/ 397 y 399 El Rancho, Santiago de las Vegas, municipio de Boyeros, La Habana me comunica lo siguiente:

“Llevo viviendo en esta casa 52 años y aquí crié a mis 8 hijos y recuerdo que el gobierno nunca me ha ayudado en nada, ni cuando tuve a mis hijos chiquitos y pasaba un trabajo de madre. Hubo días en que me acosté son comer nada. La vida que he llevado y que llevo no se la deseo a nadie”.

“He pasado muchos ciclones y esto se empeora cada vez más, ya que como ve esta casa es de madera y cartón y como no tengo porque el gobierno no vende materiales para mejorarla. Todo esto está podrido y se me moja por todas partes, cuando llueve me tengo que volver una artista para cuidar lo que tengo, no es mucho pero no tengo más nada. El piso es de arena y cemento, desde que vivo aquí todo es lo mismo por eso está tan malo. Este es un barrio de gente pobre, no sé si el gobierno lo hace a propósito o le conviene tenernos así con esta pobreza, pero a mí me parece que en el mundo hay pocas familias que viven así”.

“Ojalá se me pueda ayudar en algo ya soy una persona vieja, tengo 68 años, ya no puedo luchar como antes, aunque mis hijos sean grandes, ellos también son pobres y tienen miserias. Quisiera que algún día Cuba tenga más libertad por lo menos no pasar tanta hambre”.


La Habana, 22 de enero de 2010.



Una colaboración de José Díaz Silva para la Red Cubana de Comunicadores Comunitarios